El día que Bielsa dejó libre a Claudio Vivas en las inferiores de Newell’s
Eran los finales de la década del 80. José Vivas era directivo de Newell’s y en las inferiores jugaba Claudio, uno de sus hijos. Paralelamente, Marcelo Bielsa mostraba sus primeras armas como entrenador y se preparaba para dar el salto a la Primera División. Pero antes, el Loco fue protagonista –casi obligado- de una incómoda situación.
El propio Claudio Vivas le relató a Info Leprosa cómo fue el día en que Bielsa le comunicó que iba a quedar con el pase libre. Según él, esa es la anécdota más significativa junto al Loco.
“Como mi viejo era un buen dirigente en el club, nadie se animaba a dejarme libre. Yo jugaba en la Cuarta Especial, me había prestado a Unión de Álvarez y no tenía condiciones, no quería atajar en Primera porque sabía que le iba a hacer un mal a Newell’s. Iba forzado a entrenar, mi viejo me presionaba para que lo hiciera”, recordó Claudio.
Un día estaba acomodando algunos elementos de trabajo en la utilería y Bielsa lo encaró: “Acá nadie se lo quiere decir, pero usted no tiene nivel y a partir de mañana es jugador libre”. En ese preciso instante, el Loco le quitó a Vivas una mochila pesadísima de encima. Reaccionó con palabras de agradecimiento y, tiempo después, se enteró que Bielsa creyó que lo estaba chicaneando, que estaba siendo irónico. Nada más alejado de la realidad.
El “dolor de bolas” había terminado. El manoseo de los entrenadores de las juveniles había terminado y los tratos preferenciales por ser “hijo de” también.
Claudio volvió a su casa e informó a su padre José la noticia. El dirigente que se alejó de Newell’s en el 93, cuando arribó Eduardo López, y falleció en el 94, no comprendía la felicidad de su hijo. “En el único lugar en el que podía atajar con mi estatura de 1,73 era en el campo con mis amigos. Y era muy malo con los pies, ya no tenía tiempo de cambiar de puesto”, cuenta entre risas.
Estudió un tiempo medicina, pero sintió que no era lo suyo y direccionó su vida profesional otra vez al fútbol. Inició el profesorado de educación física, aunque Vivas pretendía ser técnico de fútbol. A los 19 años entrenaba y ayudaba en las infantiles. Tenía vocación para eso.
Y al poco tiempo, cuando Bielsa agarró la Primera, Lulo Milici le recomendó a Claudio Vivas. “Él necesitaba a alguien que fuera a ver jugadores, los entrenamientos rivales… Me daba el auto, me pagaba los gastos, todo con el consentimiento de Griffa porque yo ya trabajaba en inferiores”, revuelve en su memoria.
En el año 93, Bielsa quiso llevar a Vivas a México, pero tuvo una respuesta negativa. Claudio dirigía la categoría 77 de Lucas Bernardi, entre otros futbolistas, e iba a dirigir el Campeonato Latinoamericano. Newell’s llegó a la final y cayó 4-0 con Lanús. A los seis meses, Bielsa volvió a llamarlo y lo convenció. Vivas renunció en Newell’s y acordó su arribo como colaborador en Atlas. Más tarde llegaría la Selección…
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